jueves, 21 de octubre de 2010

Algunos criterios para elegir fardos de buena calidad

El valor de la alfalfa radica en su alto potencial de producción de materia seca, alta concentración de proteína, alta digestibilidad y un elevado potencial de consumo animal. A esto debe sumarse su alto contenido de vitaminas A, E y K o sus precursores, y de la mayoría de los minerales requeridos por el ganado productor de leche y carne, en especial calcio, potasio, magnesio y fósforo.

Pero durante su corservación el forraje pierde gran parte de su valor nutritivo y digestibilidad, lo cuál ocurrirá en mayor o menor medida, dependiendo de las condiciones bajo las cuáles se lleve a cabo todo el proceso.

Es por esto que resulta de gran importancia elegir fardos de la mejor calidad posible, en base a un análisis mas bien cualitativo, rápido y práctico, para lo cuál solo necesitamos de la vista, el olfato y el tacto.

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